el recital video – poético que transita por las memorias de quienes son exiliados e inxiliados a causa del conflicto. Erik Arellana Bautista, poeta, documentalista, periodista y director de Inxilio, fusiona la poesía, la música, las artes visuales y los testimonios de víctimas y sobrevivientes del conflicto, para darle vida a historias de colombianos que viven exiliados en su propia tierra, conjugando sus experiencias propias a raíz de la violencia que vivió en «carne propia» cuando su madre, Nydia Erika Bautista, militante de la guerrilla del M-19, fue desaparecida y asesinada por agentes del estado el 30 de agosto de 1987. Una obra que, a través del arte, invita a la defensa de los derechos humanos, como la búsqueda de la verdad y la justicia. Donde los visitantes podrán transitar por los recuerdos y memorias de las víctimas, que tuvieron el coraje de hablar y compartir sus experiencias.
Seis para las siete
Los días grises como hoy lunes,
llevan el recuerdo de personas que conocimos
o de poetas que leímos
y nos llevaron a descubrirnos como somos,
fragmenticos de otros que se armaron bajo la piel,
y se fueron pegando con la textura de la miel y de la sangre,
como aquella con la que bañados nacemos.
Los días grises como hoy lunes de agosto,
me bañan el corazón con la misma sangre
de algunos campesinos
que perecen mientras cultivan la tierra
para darnos otros pedacitos
de tierra y agua dulce,
fruta fresca que sacia nuestra sed
y calma nuestros ayunos,
gentes desconocidas vienen a mi plato y a mi mesa.
Así me voy haciendo mayor y entre letras,
busco el espejo de este instante
en el que preferí escapar del mundo
cosiendo letras y palabras,
para hacerme libre en goticas de tinta negra,
como la piel de los que nunca cruzaron la frontera,
granos de sal y arena,
conchas, corales y perlas refundidos en la tormenta.
Aquí estoy perdido en una esquina sin fronteras ya sé que en los minutos me espera el recuerdo siempre de mis padres
que yacen bajo tierra
la esperanza de mis hermanos adoptivos de otros hermanos de pueblo como ella quisiera y me persigue mi condena.
Qué decirles que no hay peces que sobrevivan en la etérea tierra. Que un niño de hambre llora y su canto se convierte en agua estéril.
Que voy cargando con las contradicciones de este sistema inútil.
Y no voy, no quiero ir a la guerra, a matar al hijo de María, ni de Juana, al heredero de Pablo, al vendedor de hechicerías pendencieras.
Nada cambia escribió el poeta nos queda un réquiem
por los que vivos parecieren por los que perecen sin saberlo, sin merecerlo, quién nos metió en este endiablado crimen, quién me ha de decir que no merezco la hoguera
la población civil es siempre la que lleva.
Si estamos sumergidos en smock, balas, plomo y represión
dicen que las prácticas rituales de mis antecesores condenadas fueron, porque no se largan a otro planeta
y nos dejan sembradores artesanos y poetas exiliados de la república bananera.
Desde la montaña en las fronteras en pie de lucha la vida reclama respeto, dignidad y autodeterminación.
Nuestro es el grito es sentimiento vivo que le exige a las multinacionales que paren ya la explotación la neocolonización el exterminio y la corrupción que no aceptamos sistemas económicos por políticos,
basados en el exterminio, pues las tierras no son de su dominio.
Exigimos reforma agraria No al latifundio, tierra para quien la trabaja.
Somos hijos e hijas de los guerreros que derrotaron las tiranías en estas tierras sagradas, nuestra bandera está enlutada! Decimos No a los transgénicos
al glifosato, a las fumigaciones, a la privatización de los parques nacionales, al tratado de libre comercio ALCA al plan puebla panamá, a los bombardeos al canal Atrato -Truandó, a las bases militares gringas fuera de la USA al banco mundial al fondo monetario internacional al plan patriota al plan Colombia al plan victoria
Mientras siembran palma africana y destierran afrocolombianos Aquí estamos junto a los Uwa, contra la Esso Junto a los Embera Katio contra Urra s.a con las comunidades de paz recordando a las víctimas sin olvidar ni perdonar!