Ayotzinapa una vuelta al sol

 

Los estudiantes nos enseñan

que debemos exigir respuestas

y no aceptar informes oficiales

que protegen criminales.

Han creado un movimiento

que en todo el planeta reclama:

justicia y verdad

desde su prolongada ausencia.

Nos seguimos preguntando

dónde están esos maestros

que desde hace un año ya

fueron raptados.

El mal gobierno tiene miedo

de que sean hallados

insinúan con mentiras

que los han incinerado

y pretenden que con eso nos quedaremos callados.

Cuarenta y tres mil veces gritaremos los nombres

de quienes se han llevado

una noche de septiembre

del estado de Guerrero.

No han podido borrarlos

ni con terror, ni amenazas,

ni mentiras bien planeadas,

ni con sus guerras

y valores de papel,

ni con su muerte hecha ley,

ni con asesinos en cartel,

detendrán el movimiento hasta encontrarlos.


Tres años buscándola con vida y encontramos sus restos silenciosos,

tres décadas exigiendo justicia y encontramos impunidades y olvidos

trescientas veces pronunciando su nombre de mujer libre y encontramos su legado en la lucha.

dos ojos que se apagaron como miles otros

dos voces aún replican como eco en las tardes del exilio

doscientas sombras en la noche y no hay luz para ellas en las fronteras del derecho.

una vez les llevaron

una vez los borraron

una campana aún recuerda que les seguiremos buscando hasta encontrarlos.

ninguna voz será olvidada para siempre

ninguna mirada será ignorada en la injusticia

ninguna mañana mientras viva dejaré de mencionar sus nombres.

todas las alegrías juntas por las parcelas del amor,

todas las fuerzas unidas en la esperanza de una vida mejor

todas las manos firmes en la tierra para sembrar memoria.